TEMOR A SER JUZGADO: EL ORIGEN DEL SUFRIMIENTO EXISTENCIAL
Tiempo de lectura 4 minutos

¿Últimamente te has sentido perdido, desorientado y cuestionándote el significado, propósito y rumbo de tu vida?
No te preocupes, ¡nos ha pasado a muchos!
Con seis planetas retrogradando al mismo tiempo, dos lunas llenas y el poderoso portal del león, Agosto ha sido un mes emocionalmente movido.
Este combo astrológicamente retrogradando influye en nuestro ser, llevándonos hacia nuestro interior para hacer un balance general de nuestra vida.
En este balance introspectivo, que destaca el malestar existencial, nos invita a reflexionar y "purgar" los cambios que tenemos que hacer en nuestras vidas.
EL MALESTAR EXISTENCIAL SOLO QUIERE DECIRNOS UNA COSA: POR AHÍ NO ES.
Es lo invisible lo que da vida a lo visible. Por ejemplo, la manzana es el fruto de la raíz. Sin la raíz, el fruto no existiría. Es lo que no vemos lo que da vida a lo que vemos.
Las "raíces" son nuestras creencias. La espiritualidad implica adentrarse en nuestro interior, en cuestionar el origen de nuestras creencias. Cuanta mayor claridad haya en nuestro interior, mayor felicidad se reflejará en nuestra vida.
Hacer visible lo invisible, cuestionando constantemente nuestras creencias es lo que nos guiará hacia decisiones acertadas con nuestro plan álmico.
Si hay cosas en tu vida que no te dan paz y felicidad, ¿te has preguntado sinceramente por qué haces lo que haces? ¿Lo haces de manera consciente o en piloto automático porque es lo socialmente correcto?
Si nadie te observara, ¿cuántas cosas que haces dejarías de hacer y cuántas cosas que no haces, empezarías a hacer?
Para mí, la espiritualidad consiste en ser consciente de lo invisible. Implica tener el valor de desenmascarar las mentiras que nos creamos para justificar lo que sabemos que no está alineado a nuestra alma. Significa liberarnos de creencias limitantes que bloquean nuestro crecimiento espiritual.
¿Tus acciones provienen de tu corazón o de lo que se espera de ti?
Si los resultados en tu vida no te dan paz, probablemente estés enfocado más en el qué dirán o en la aprobación de otros que en lo que realmente es importante para tu alma.
Esta necesidad de aprobación nos ha sido inculcada desde la infancia, bajo el concepto obediencia. La obediencia es seguir reglas para que el mundo funcione correctamente y de manera ordenada.
¡La obediencia siempre beneficia a unos a cuestas de otros!
¿Realmente crees que el mundo está funcionando correctamente y ordenado? ¿Para quién? Si tu vida no tiene sentido, ¿a quién le está haciendo sentido tu vida?
Cuando encuentres paz en tu mundo interior, encontrarás paz en el mundo exterior.
Si aún no has encontrado paz en tu mundo interior, quiere decir que aún temes ser juzgado.
EL ORIGEN DEL SUFRIMIENTO EXISTENCIAL ES EL TEMOR A SER JUZGADO.
El primer paso para el cambio es hacer visible lo invisible. Aquí te comparto algunas razones por las cuales buscamos el reconocimiento externo sacrificando nuestro bienestar interior:
Necesidad de aceptación y pertenencia: temor a ser rechazados o excluidos por nuestros pares.
Autoestima y autoimagen: temor a que los juicios confirmen nuestras inseguridades y afecten cómo nos percibimos.
Presión social: la sociedad establece normas, y tememos ser "diferentes" o "inadecuados".
Vergüenza: ocultamos partes de nosotros que consideramos vergonzosas para evitar el juicio.
Impacto en relaciones y oportunidades: tememos cómo nos tratarán y cómo afectará nuestras relaciones y oportunidades.
Percepción de ser diferentes: tememos a ser juzgados por nuestras creencias, valores o elecciones diferentes.
No ser competente: tememos no estar a la altura de las expectativas.
Autocrítica interna: a menudo, nuestro miedo al juicio proviene de nuestra propia autocrítica.
En última instancia, el miedo al juicio es una reacción natural cuando sentimos que nuestra valía o identidad están en juego. Reconocer este miedo es crucial para el cambio.
Una vez que identifiques y reconozcas alguna de las razones por la que temes a ser juzgado, puedes neutralizarlas siguiendo estos consejos:
Conciencia: comienza por entender tus inseguridades y pensamientos negativos que alimentan el miedo al juicio.
Acéptate: aprende a aceptarte tal cuál eres con tus fortalezas y debilidades.
Enfócate en lo positivo: dirige tu atención hacia aquello que te hace sentir en plenitud.
Desafía los pensamientos negativos: cuestiona la validez de los pensamientos distorsionados que alimentan el miedo.
Practica la autocompasión: trátate con la misma amabilidad que tendrías hacia un amigo.
Enfrenta tus temores gradualmente: exponerte gradualmente a lo que te da miedo aumentará tu confianza.
Cambia tu enfoque: cultiva una autoestima basada en tus valores, no en la aprobación externa.
Aprende de las críticas: no te pongas a la defensiva y permítete darle una oportunidad a las críticas que recibes.
Visualiza el éxito: imagina situaciones en las que te sientes seguro y confiado.
Busca apoyo: habla con amigos cercanos, familiares o un profesional sobre tus preocupaciones.
Enfócate en tu crecimiento personal: dedica tiempo y energía en tu desarrollo personal.
Recuerda que el miedo al juicio no es el problema, sino cómo enfrentamos ese miedo. El miedo es lo que limita tu crecimiento, superarlo te permitirá crecer y vivir más allá de tus límites.
Con amor, Nico
PD. Mi programa NUMA de 11 semanas está diseñado para el despertar de la conciencia donde podrás descubrir tu esencia, dones y talentos, propósito de vida y mucho más. Para mayor información ingresa a www.nicocuria.com/numa
Además, si buscas respuestas para ganar el juego de la vida, no dudes en contactarme. Para mayor información ingresa a www.nicocuria.com/coaching